Que una plataforma de formación sea accesible para cualquier estudiante es crucial para promover la igualdad de oportunidades. Al brindar acceso a contenido educativo de calidad, estas plataformas aseguran que todos los estudiantes, independientemente de su situación económica, geográfica o social, puedan adquirir las competencias necesarias para prosperar en un mundo en constante cambio. El aprendizaje flexible y a demanda, que permite estudiar desde cualquier lugar y en cualquier momento, favorece especialmente a aquellos que enfrentan barreras físicas o temporales. Además, una plataforma inclusiva fomenta la diversidad en el aprendizaje, permitiendo que estudiantes de diferentes culturas y contextos compartan sus experiencias y conocimientos. Esto no solo enriquece el proceso educativo, sino que también contribuye a crear una sociedad más equitativa y global, donde el conocimiento sea un recurso accesible para todos, sin excepciones.